17/12/2025
Ni truco de mago: la estafa que desarma negocios en Santa Cruz de Yojoa
Una estafa ejecutada en segundos está dejando pérdidas y desconfianza en los negocios de Santa Cruz de Yojoa. La banda engaña a cajeras sin que puedan reaccionar.
La banda delincuencial sorprendió a varios negocios en Santa Cruz de Yojoa.
Foto creada con IA.
La estafa que circula en un video viral no necesita fuerza, amenazas ni gritos. Solo requiere un billete de 500 lempiras, un gesto calculado y un instante de duda.
En Santa Cruz de Yojoa, donde las rutinas comerciales se repiten sin pausa, ese segundo de desconcierto es suficiente para que una banda ejecute un engaño tan rápido que parece coreografiado.
La escena ocurre en cuestión de respiraciones: un hombre se acerca al mostrador, entrega un billete y, en menos de lo que tarda un cliente en acomodar una compra, ya recuperó ese dinero, confunden a la cajera y exigen un cambio. "el vuelto", que nunca le corresponde.
La estafa del billete: precisión, engaño y segundos perdidos
La cámara del negocio registró cada movimiento. El hombre entrega un billete de 500 lempiras para pagar un producto, pero, antes de que la cajera pueda concretar la transacción, lanza la frase que rompe todo el orden: “Anda suelto”.
Lo dice con naturalidad, como quien recuerda algo de repente. Pide que le devuelvan el billete, y la joven, sin ver amenaza alguna, accede.
Ahí entra en escena la destreza del estafador. Mientras simula buscar monedas en su cartera, oculta el billete entre sus pertenencias.
El gesto es rápido, limpio, casi imperceptible. Después exige el vuelto de los supuestos 500 lempiras, alegando que la cajera “ya los tiene”.
Confundida por el ritmo del reclamo y el tono insistente, la trabajadora entrega alrededor de 462 lempiras, convencida de que recibió el dinero.
El hombre se marcha con las manos llenas: el vuelto y el billete. La estafa se consumó.
La circulación del video enciende la alerta entre comerciantes de Santa Cruz de Yojoa, quienes temen que la banda replique la estafa en otros establecimientos.
“Es demasiado rápida. No le da tiempo ni de pensarlo”, comentó un dueño de pulpería que vio el video repetidas veces para identificar el truco.
Otros decidieron reforzar protocolos internos: revisar billetes dos veces, registrar transacciones antes de devolver dinero y capacitar al personal para no dejarse presionar por el cliente.
Autoridades piden colaboración
Ante la preocupación, la Policía Nacional habilitó la línea 9776-5723 para que los ciudadanos compartan información que permita identificar a los involucrados.
La institución reconoce que la banda actúa con agilidad y planificación, lo que dificulta su ubicación sin apoyo de la comunidad.
La difusión del video es clave para comprender el modus operandi, pero detener la cadena de engaños requerirá más que alertas: se necesita denuncia, identificación y vigilancia.
En Santa Cruz de Yojoa, donde cada lempira cuenta, una estafa tan silenciosa y veloz se convierte en un golpe doble: afecta el bolsillo y erosiona la tranquilidad.
Lo que parece un acto menor, un billete, un reclamo, un vuelto, es en realidad un mecanismo depurado de manipulación.
Y aunque no sea magia, la sensación que deja es la misma: cuando todo termina, nadie entiende cómo ocurrió tan rápido.