25/06/2025
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El 6 de julio del 2017, Linkin Park se presentaba en la Arena Barclaycard, en Inglaterra. Parecía otro gran show en vivo de la banda, sin embargo... algo andaba mal con Chester.
Hacia la hora con 20 minutos, cuando empezaron a tocar "in the end", Chester Bennington lucía apagado... como si no quisiera estar ahí. Incluso su pasión por el canto había desaparecido, y sus ojos parecían vacíos. Es como si no tuviera sentimientos.
Cuando llegó el primer coro "I tried so hard, and got so far. But in the end, it doesn´t even matter" ("Lo intenté tanto, y llegué tan lejos. Pero al final, ya ni siquiera importa"), su voz parecía ya no tener fuerza. Apenas se oía y Chester constantemente se agarraba el estómago.
Chester estaba sufriendo, completamente en vivo.
Cuando llegó el puente "I put my trust, in you" ("Puse mi fe en ti"), sucedió algo que jamás había ocurrido. Chester CANTÓ EL PUENTE, jamás lo había cantado. En esa parte de la canción, él siempre le daba el micrófono al público. Pero esta vez, Chester Bennington cantaba "In the end" para sí mismo.
Nadie lo sabía en ese momento, pero aquella sería la última presentación de Linkin Park en vivo con Chester Bennington, pues a los 14 días fue hallado m # en su casa. Y todos saben lo que pasó.
Me parece importante hablar de esto porque estamos en junio, el Mes de la salud mental masculina, y pareciera que a nadie le importa. Bueno, a mi sí.
Por Chester Bennington, por aquellos que están cansados... y nadie lo nota, quiero decirles que también son valiosos, son importantes.
Ninguna tormenta es eterna.