28/10/2025
Asistir, participar o involucrarse?
Por: Oscar Meza
En muchas empresas de San Quintín, mejorar las condiciones laborales es una necesidad evidente, pero no siempre abordada con la profundidad que merece. Jornadas extensas, procesos poco definidos, escasa comunicación interna y falta de espacios para el desarrollo profesional son parte de una realidad que requiere más que buenas intenciones.
Hace unos meses, durante una jornada de capacitación en una empresa agrícola local, un grupo de trabajadores compartió una experiencia que ilustra bien esta reflexión. Uno de ellos comentó:
“Aquí todos venimos a trabajar, pero pocos sentimos que lo que hacemos importa más allá del día a día.”
Esa frase, sencilla pero poderosa, abrió una conversación sobre cómo pasar de simplemente asistir al trabajo, a realmente involucrarse en su mejora.
Asistir es estar presente, cumplir con lo mínimo, esperar instrucciones.
Participar implica opinar, colaborar, aportar ideas.
Involucrarse va más allá: es asumir responsabilidad, entender el propósito de lo que hacemos y contribuir activamente a mejorar el entorno laboral.
Las empresas que promueven el involucramiento de sus equipos suelen ser más resilientes, más productivas y humanas. Involucrarse significa cuestionar procesos que ya no funcionan, proponer mejoras, cuidar el clima laboral y construir relaciones basadas en el respeto y la confianza.
En un contexto como el de San Quintín, donde el crecimiento económico está ligado al esfuerzo colectivo, el involucramiento de las personas en sus espacios de trabajo puede ser el motor de una transformación profunda. No se trata solo de exigir mejores condiciones, sino de participar en su diseño, implementación y evaluación.
La mejora continua no es exclusiva de los manuales de calidad: es una actitud. Y cuando esa actitud se convierte en cultura, las empresas no solo crecen, sino que se convierten en lugares donde las personas quieren estar, aportar y desarrollarse.
La pregunta sigue vigente: ¿asistimos, participamos o nos involucramos?
La respuesta puede marcar la diferencia entre una empresa que sobrevive y una que trasciende.
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🖋 El autor es consultor empresarial en planeación estratégica, optimización de procesos y desarrollo organizacional, director operativo de la firma Meza & Asociados