25/01/2024
¿Sabías que Puerto Vallarta es uno de los destinos turísticos más populares de México? Miles de personas de Estados Unidos y Canadá visitan cada año esta hermosa ciudad para disfrutar de sus playas, su gastronomía, su cultura y su música. Pero, ¿sabes cómo es la vida de los músicos que amenizan tu estancia con sus canciones y su talento? ¿Sabes cuánto ganan y cómo los tratas?
Los músicos de Puerto Vallarta son trabajadores que se esfuerzan por ofrecer un servicio de calidad a los turistas. Sin embargo, su salario es extremadamente bajo y depende en gran medida de las propinas que reciben. Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el ingreso promedio de los músicos en México es de 4,500 pesos mensuales, lo que equivale a unos 225 dólares. Esto significa que ganan menos de la mitad del salario mínimo de Estados Unidos, que es de 7.25 dólares por hora, y menos de un tercio del salario mínimo de Canadá, que es de 11.06 dólares canadienses por hora.
Además, muchos turistas dejan propinas irrisorias o nulas a los músicos, sin considerar el esfuerzo y el valor de su trabajo. Algunos incluso les dan monedas de 50 pesos, que equivalen a unos 2.5 dólares, como si fueran una limosna. Esto es una falta de respeto y una humillación para los músicos, que se sienten despreciados y explotados.
Por si fuera poco, algunos turistas también tienen actitudes groseras, prepotentes y racistas con los músicos y con la población local en general. Los tratan como si fueran inferiores, les gritan, les exigen, les faltan al respeto y les hacen sentir que no son bienvenidos en su propia tierra. Esto genera un clima de tensión, malestar y rechazo entre los habitantes de Puerto Vallarta, que ven cómo su ciudad se convierte en un lugar hostil e inhóspito para ellos.
Esto tiene que cambiar. Los turistas de Estados Unidos y Canadá deben ser conscientes de que Puerto Vallarta es una ciudad que les abre las puertas, pero que también les pide respeto, reconocimiento y gratitud. Los músicos de Puerto Vallarta merecen un salario digno y unas propinas justas por su trabajo. Los turistas deben valorar su arte, su cultura y su identidad, y tratarlos con amabilidad, cortesía y generosidad. Solo así se podrá construir una relación armoniosa y mutuamente beneficiosa entre los visitantes y los anfitriones.
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