06/11/2025
Mérida, Yucatán. — Una nueva muestra de abandono y descuido hacia quienes entregaron su vida laboral a Petróleos Mexicanos (Pemex) se registró este día en Mérida, donde jubilados y derechohabientes del sistema de salud petrolero fueron prácticamente expulsados y dejados bajo la lluvia, sin poder recibir atención médica que por derecho les corresponde.
Pemex mantiene un contrato vigente con la empresa de servicios hospitalarios MediMac, misma que tiene la obligación de brindar atención de Nivel II a todos los trabajadores activos y jubilados en la Península de Yucatán. Existen dos sedes para brindar el servicio:
- Consultorios en Calle 60, Centro de Mérida, donde deben otorgarse consultas, recetas y pases médicos.
- Clínica en Plaza Uptown, para urgencias, cirugías, análisis, imagenología y hospitalización.
Sin embargo, trabajadores y jubilados denuncian que, debido a la supuesta falta de pago por parte de Pemex, MediMac solo abre entre una o dos horas al día, normalmente de 3:00 a 4:40 PM, dejando a cientos de personas sin atención.
Hoy, la humillación fue pública y brutal
Decenas de adultos mayores avecinados en Mérida acudieron a sus consultas programadas en medio de la lluvia, solo para encontrarse con la puerta cerrada. Nadie les daba información. Nadie salía a explicar. Los mantuvieron bajo la intemperie, empapándose.
Cuando finalmente se abrió la puerta ligeramente, algunos entraron caminando con calma, pensando que finalmente serían atendidos. No hubo empujones. No hubo fuerza. Solo necesidad y cansancio.
Pero la respuesta de MediMac fue llamar a la policía.
Sí. Policías para desalojar a jubilados enfermos.
Personas que entregaron décadas de servicio al país fueron tratados como invasores, cuando lo único que exigían era atención médica básica.
¿Dónde está Pemex? ¿Dónde está el sindicato?
Mientras las instalaciones se cierran, mientras los adultos mayores enfermos esperan bajo la lluvia, mientras se llama a la policía para amedrentar a ciudadanos enfermos y desprotegidos, ni Pemex ni el Sindicato Petrolero han emitido una sola palabra.
Ni explicación.
Ni solución.
Ni vergüenza.
La realidad es clara:
- Los jubilados están siendo abandonados.
- El contrato con MediMac se está incumpliendo.
- Pemex no está garantizando el derecho a la salud.
- Y el Sindicato Petrolero, que debería defenderlos, permanece en un silencio cómplice.
Ya no es un problema administrativo.
Es una violación a la dignidad humana.
Las personas que hoy fueron humilladas construyeron la empresa que aún sostiene la economía nacional.
No merecen ser tratados como estorbo.
Exigimos:
- Que Pemex explique de inmediato la situación del contrato con MediMac.
- Que se garantice atención continua y digna.
- Que el Sindicato defienda a los trabajadores que dice representar.
Si un país no es capaz de respetar a quienes lo levantaron, no tiene futuro.