25/08/2025
No alarmarse ante un huracán no significa restarle importancia, sino mantener la calma para tomar decisiones correctas y actuar con seguridad. El pánico puede llevar a errores que ponen en riesgo tu vida y la de los demás. Te explico las razones principales por las que es mejor no alarmarse, pero sí estar bien informado y preparado:
1. El pánico puede nublar el juicio
Si te asustas demasiado, es más probable que tomes decisiones impulsivas, como salir corriendo sin rumbo o no seguir las indicaciones oficiales.
La calma te ayuda a pensar con claridad y actuar de manera ordenada.
2. La información confiable evita rumores
Muchas veces, la desinformación en redes sociales causa más miedo que el propio huracán.
Si mantienes la calma, puedes verificar la información en fuentes oficiales como:
CONAGUA
Protección Civil
Servicio Meteorológico Nacional (SMN)
3. No todos los huracanes tienen el mismo impacto
Los huracanes se clasifican en categorías del 1 al 5 según su intensidad.
No todos requieren evacuación inmediata; algunos solo generan lluvias y vientos moderados.
Si te informas sobre la categoría y trayectoria, sabrás qué medidas exactas tomar.
4. Mantener la calma ayuda a preparar un plan
Si no entras en pánico, puedes:
Armar un kit de emergencia.
Preparar documentos importantes.
Identificar refugios cercanos.
Coordinarte con tu familia para actuar juntos.
5. Las autoridades tienen protocolos de seguridad
Los equipos de Protección Civil, la Marina y otras instituciones tienen planes establecidos para huracanes.
Si confías en ellos y sigues las instrucciones, aumentas tu seguridad.