25/10/2025
JOSUÉ 5
La victoria viene De Dios
En este pasaje, vemos cómo Dios derrota al enemigo sin que el pueblo de Israel tenga que pelear. La noticia del milagro del Jordán seco hace que los reyes de los amorreos y los cananeos pierdan el ánimo y se rindan antes de la batalla.
“Cuando todos los reyes de los amorreos, que estaban al otro lado del Jordán, al occidente, y todos los reyes de los cananeos, que estaban cerca del mar, oyeron cómo Jehová había secado las aguas del Jordán delante de los hijos de Israel, hasta que hubieron pasado, desfalleció su corazón, y no hubo más aliento en ellos delante de los hijos de Israel.” (Josué 5:1).
Restablecimiento de la Circuncisión. En Josué 5:2-7, vemos cómo Josué restablece la circuncisión en el pueblo de Israel. Dios ordena a Josué que circuncide a los hijos de Israel que habían nacido en el desierto y no habían sido circuncidados. La circuncisión era un símbolo del pacto entre Dios y su pueblo. Al restablecer la circuncisión, Josué estaba renovando el pacto y preparando al pueblo para la conquista de la tierra prometida.
Después de la circuncisión, el pueblo de Israel celebra la Pascua en Gilgal y comienza a disfrutar del fruto de la tierra. Esto muestra que cuando obedecemos a Dios, podemos disfrutar de sus bendiciones y promesas: “Y los hijos de Israel acamparon en Gilgal, y celebraron la pascua a los catorce días del mes, por la tarde, en los llanos de Jericó. Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas. Y el maná cesó el día siguiente, desde que comenzaron a comer del fruto de la tierra; y los hijos de Israel nunca más tuvieron maná, sino que comieron de los frutos de la tierra de Canaán aquel año.” (Josué 5:10-12). “nunca más tuvieron maná,”
La Importancia de Gilgal.
Gilgal ocupa un lugar importante en la historia de Israel. Fue el lugar donde los israelitas acamparon después de cruzar el Jordán y donde se renovó el pacto con Dios a través de la circuncisión. En Gilgal, los israelitas celebraron la primera pascua en la tierra prometida y dejaron de recibir el maná, comenzando a comer del fruto de la tierra. Gilgal también sirvió como base para las operaciones militares de la conquista de Canaán. Gilgal representa un nuevo comienzo y una renovación del pacto con Dios. Es un lugar de transición de la vida en el desierto a la vida en la tierra prometida. Josué 4:19; Josué 5: 10-12.
*La Revelación de Cristo como Príncipe del Ejército del Señor*
En Josué 5:13-15, vemos una manifestación impresionante de Cristo como Príncipe del ejército del Señor. Josué se encuentra con un varón que tiene una espada desenvainada en su mano, y después de una breve conversación, se da cuenta de que es Cristo mismo.
“Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? Él respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo? Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo.” (Josué 5: 13-15).
La presencia de Cristo es crucial en nuestras batallas espirituales. Él es el que lucha por nosotros y nos da la victoria. La espada desenvainada en su mano simboliza el poder y la autoridad de Cristo sobre el enemigo. La respuesta de Josué al ver a Cristo es de adoración y reverencia. Se postra sobre su rostro en tierra y le adora, reconociendo su divinidad y autoridad.
"¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos?" (Josué 5:14). La pregunta de Josué nos muestra su disposición a evaluar la situación y determinar si el varón que tiene delante es un aliado o un enemigo. Sin embargo, la respuesta del Príncipe del ejército de Jehová nos muestra que no se trata de una cuestión de ser "de los nuestros" o "de nuestros enemigos", sino de reconocer su autoridad y divinidad.
La misma orden que se había dado a Moisés en Horeb: “Quita tus zapatos de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa es” reveló el carácter verdadero del misterioso forastero. Era Cristo, el Sublime, quien estaba delante del jefe de Israel. Dominado por santo temor, Josué cayó sobre su rostro, adoró, y tras oír la promesa: “Mira, yo he entregado en tu mano a Jericó y a su rey, con sus varones de guerra,” recibió instrucciones respecto a la toma de la ciudad.” Patriarcas y Profetas, pág., 521.
¿De qué manera puedo disfrutar de las bendiciones de Dios en mi vida?
¿Cómo puedo confiar en la guía y la dirección de Dios en mi vida?
¿Cómo puedo renovar mi compromiso con Dios y experimentar un nuevo comienzo en mi vida?
¿Cómo puedo reconocer la presencia de Dios en mi vida y en las situaciones que enfrento?
Dios te bendiga.
Ptr. Martin Olvera García.
