11/04/2024
¡Compartiendo Nuestros Logros!
Sin miedo al qué dirán.
Hace casi un año, me me invitaron a participar en el “Foro Internacional de Mercadotecnia de la Facultad de Economía” en la UAEM, y wow, ¡Qué experiencia! Al principio, no paraba de pensar: “¿Y si me ven como una presumida por compartir esto?”. Pero aquí entre nos, ¿sabes? He aprendido que esas pequeñas victorias, esos logros que a veces pasamos por alto o no nos atrevemos a compartir, son justo lo que necesitamos celebrar más.
¿Y si te dijera que cada logro que tienes, por pequeño que sea, es como una chispa que puede encender un montón de sueños a tu alrededor? Sí, al principio me costaba creerlo. Pensaba: “Si comparto mis éxitos, van a creer que me las doy de importante”. Pero, ¿sabes qué? Me di cuenta de que es todo lo contrario.
Cada vez que hablo de lo que he logrado, no es solo por darle una palmadita a mi espalda. Es más bien como lanzar una señal al Universo, un “hey, aquí estoy yo, haciendo lo mío”. Y eso, increíblemente, resuena con la gente. Es como si al compartir, invitara a otros a pensar: “Si ella pudo, yo también puedo”.
Entender esto cambió mi juego por completo. Ahora veo cada conferencia, cada participación en eventos, como mi pequeña revolución personal. Es mi manera de contribuir, es una oportunidad de oro para pasar la antorcha, para inspirar a quien esté al otro lado soñando con sus propias metas una forma de decir: “Vamos, el mundo está lleno de posibilidades y aquí hay una prueba”.
Además, este compartir se ha convertido en una herramienta brutal para conectar. Porque, al final del día, vivimos en un mundo donde quien no se muestra, no existe. Y no hablo de presumir, sino de mostrar el camino que has recorrido, las batallas que has ganado. Eso puede abrirte puertas que ni te imaginas, traerte oportunidades de esas que cambian la vida.
Vamos a soltarnos un poco, a celebrarnos más y a dejar de lado, el miedo a qué dirán. Así que, mi nuevo Mantra es: ¡Comparte, Comparte, Comparte! Porque cada logro que cuentas no solo te eleva a ti, sino que puede ser el faro que alguien más necesita para encontrar su rumbo. Al final, lo que hacemos y lo que compartimos construye nuestra historia. Y yo, QUIERO QUE LA MÍA INSPIRE.
