27/10/2025
Requiescat in pace S.E.R. Francisco Moreno Barrón 🕯️🙏🏼
Diocesis Ensenada
Conferencia del Episcopado Mexicano
La Diócesis de Ensenada
ante el fallecimiento de
S.E.R. † Mons. Francisco Moreno Barrón
Arzobispo de Tijuana
La Diócesis de Ensenada recibe con profundo dolor y, al mismo tiempo, con esperanza cristiana, la noticia del fallecimiento de nuestro hermano en el episcopado, Pastor y Padre de la Iglesia que peregrina en Tijuana, †Mons. Francisco Moreno Barrón. Después de un prolongado tiempo de enfermedad —vivido con fe, abandono y unión a la cruz del Señor— el Padre, rico en misericordia, lo ha llamado a participar de la Pascua eterna de Cristo.
En nombre de nuestro Obispo, Mons. Rafael Valdez Torres, del presbiterio, de la vida consagrada y de todo el pueblo santo de Dios que peregrina en Ensenada, expresamos a la Arquidiócesis de Tijuana, a su presbiterio, a sus comunidades y a la familia de Mons. Moreno Barrón nuestras más sentidas condolencias y nuestra cercanía sincera.
La Iglesia nos enseña —como afirma el Catecismo de la Iglesia Católica— que “los que mueren en la gracia y en la amistad de Dios… están ya con Cristo” (CEC 1023). Por ello, en medio del dolor, nuestra fe nos consuela: “Si morimos con Él, viviremos con Él” (2 Tim 2,11).
Recordamos además las palabras del Papa Francisco (o del Papa León XIV, si lo deseas ajustar):
«La vida del discípulo se comprende a la luz de la Pascua: el cristiano no camina hacia la muerte, sino hacia el encuentro.»
Hoy damos gracias a Dios por el ministerio de Mons. Francisco:
por su entrega pastoral, su amor a la Iglesia, su ternura de pastor y su fidelidad hasta el final. Creemos que el Buen Pastor no olvida a los que entregaron la vida guiando a su rebaño.
Como diócesis hermana, nos unimos en oración y en sufragio por su eterno descanso, a la vez que imploramos para la Iglesia en Tijuana el don de la paz, la fortaleza y la esperanza.
Invitamos a todas nuestras comunidades parroquiales, movimientos y fieles de nuestra diócesis a elevar juntos nuestra oración:
“Concede, Señor, el descanso eterno a tu siervo, y brille para él la luz perpetua. Que su alma, por la misericordia de Dios, descanse en paz.”
Nuestra Señora de Loreto
Consuelo de los afligidos y Madre de la Iglesia,
ruega por nosotros.