14/07/2025
"¡El Señor Jesús está triste!
La gente ama más al mundo que al Señor.
Si tú amas al Señor, ¡Amén!
¿Lo has notado?
Cada vez hay menos personas que rezan.
Los que adoraban, se han dispersado.
El corazón que buscaba a Dios, se ha enfriado.
Las luces del mundo han desviado su mirada.
Los deseos, el entretenimiento, el dinero...
Han reemplazado el lugar de Dios en sus corazones.
La Biblia ya nos lo advirtió: ""Y por la inundación de los vicios, se enfriará la caridad de muchos"" (Mateo 24:12).
Los desastres continúan, los últimos días han llegado, el mundo no puede salvarte, la fama y la fortuna no pueden salvarte. ¡Sólo Dios es tu única dependencia!
¡Apresúrate a volver a Dios mientras todavía hay una oportunidad! ¡Arrepiéntete! ¡Reza! ¡Adora!
Que Dios se apiade de ti y te salve, si quieres, ¡amén!
Dios dice: ""Dios creó este mundo, creó a esta humanidad y, además, fue el arquitecto de la antigua cultura griega y la civilización humana. Solo Dios consuela a esta humanidad y solo Él cuida de ella noche y día. El desarrollo y el progreso humanos son inseparables de la soberanía de Dios, y la historia y el futuro de la humanidad son inextricables de los arreglos de Dios. [...] Si esta desea tener un buen destino, si un país desea un buen destino, entonces el hombre debe postrarse ante Dios y adorarlo, arrepentirse y confesarse ante Él, si no, la suerte y el destino del hombre serán una catástrofe inevitable""."