23/10/2025
La santidad no es un destino reservado para unos cuantos elegidos; es una invitación abierta, una posibilidad real para todos los que buscan a Dios con corazón sincero. En esta edición, queremos recordarte que la santidad no se mide por milagros extraordinarios, sino por la fidelidad cotidiana, por ese sí constante que transforma la vida.
Carlo Acutis, el joven que evangelizó con una computadora y una sonrisa, nos muestra que la santidad puede vestirse de jeans y navegar en internet. Su historia, llevada al cine por Juan Carlos Carredano, nos revela que Dios sigue hablando a través de los santos del presente, y que incluso una película puede ser instrumento de gracia.
Desde otra trinchera, el ministerio Cielo Abierto nos enseña que la música también puede ser camino de santificación. En cada concierto, en cada adoración, buscan enamorar alas almas de Jesús Eucaristía, recordándonos que la santidad florece cuando el corazón se postra ante el Amor.
Y en el silencio del dolor, una historia más nos sacude: la de una monja secuestrada durante cinco años por Al Qaeda, cuya fe indomable desafió el miedo y la oscuridad. Su testimonio nos recuerda que incluso en las pruebas más terribles, la luz de Cristo no se apaga.
Cada página de esta edición es una llamada: la santidad es posible, aquí y ahora. Basta dejar que el Amor te encuentre, y responder —como Carlo—: “No yo, sino Dios”.