01/10/2025
Lidia Aracely Cano Mosqueda se despide de la Refinería Salamanca tras 35 años de servicio y compromiso
Salamanca, Gto.- En una noche de emociones, música y orgullo, Lidia Aracely Cano Mosqueda cerró un ciclo de más de tres décadas de trabajo ininterrumpido como operaria de primera en el Taller de Soldadura de la Refinería de Salamanca, despidiéndose con el último “reguiletazo” a las 12 de la noche por la puerta cuatro, acompañada de mariachi y rodeada del cariño de sus seres queridos.
Con 35 años de antigüedad en Petróleos Mexicanos (Pemex), Lidia Aracely se convirtió en una figura ejemplar dentro de la industria, no solo por su compromiso y profesionalismo, sino por su papel como una de las pocas mujeres que logró consolidarse en el Taller de Soldadura. Desde su ingreso, quedó de planta, marcando el inicio de una historia de constancia, esfuerzo y superación.
“Me voy agradecida con la empresa, con la gerencia y especialmente con el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), Sección 24, encabezada por Luis Miguel Lee Palos y por nuestro Jefe Político, Fernando Pacheco Martínez, quienes me brindaron todo su apoyo para que hoy pueda g***r de mis beneficios y prestaciones”, expresó con voz entrecortada pero firme.
Durante su despedida, no faltaron los abrazos, las palabras de reconocimiento y los buenos deseos. La música de mariachi amenizó el emotivo momento en que Lidia Aracely dejó por última vez las instalaciones que fueron su segundo hogar por más de 35 años.
Al final de este capítulo laboral, se abre uno nuevo que le llena de ilusión, dedicarse plenamente a su familia, en especial a sus hijos, quienes han sido su apoyo incondicional a lo largo de su trayectoria, y a quienes ahora podrá dedicarles más tiempo.
“Cuídense, cuiden su trabajo. El camino no siempre es fácil, pero vale la pena llegar a la meta. Que Dios los bendiga a todos, y que puedan alcanzar su jubilación como yo lo hice, con la frente en alto, de corazón y la familia a tu lado”, dijo emocionada.
Hoy, Lidia Aracely Cano Mosqueda se jubila, pero su historia queda grabada como ejemplo de lucha, perseverancia y amor por el trabajo bien hecho. Su legado perdurará entre quienes la conocieron, trabajaron con ella y se inspiraron en su fortaleza.
Ahora, disfrutará lo trabajado, con la tranquilidad de haber cumplido, y la dicha de empezar una etapa de descanso, plenitud y vida familiar.
¡Felicidades, compañera Lidia! Que esta nueva etapa esté llena de salud, alegría y momentos inolvidables junto a los tuyos.