05/09/2025
CONFUSIÓN, TENSIÓN Y DUDAS: LA CRISIS POR EL SERVICIO MÉDICO MUNICIPAL ESCALA EN SAN JOSÉ DE ITURBIDE
• Gobierno Municipal convoca a “reunión informativa obligatoria” a trabajadores de base y confianza que dejó más preguntas que respuestas; ir a huelga de sindicato se mantiene activa.
El gobierno de San José de Iturbide vive una creciente tensión laboral que amenaza con desembocar en huelga o en demanda colectiva. En medio del conflicto entre el gobierno municipal y los trabajadores sindicalizados, el alcalde Manuel Montes de la Vega convocó este martes a todo el personal -sindicalizados y de confianza-, a una reunión obligatoria para informar sobre el servicio de salud que otorga la administración.
El encuentro, inusual y presuntamente privado, realizado en el auditorio de la Presidencia Municipal, lejos de calmar los ánimos, evidenció la distancia y el desencuentro que prevalece entre el Ayuntamiento y el Sindicato de Trabajadores Municipales, que previamente ya llevó sus inconformidades al Tribunal Laboral del Estado de Guanajuato.
Los empleados, sobre todo los afiliados al sindicato, han reclamado deficiencias en la atención médica, falta de medicamentos, procesos burocráticos engorrosos y, en particular, un conflicto con la Clínica Santa Lucía, encargada de brindar servicios básicos y de especialidad.
Durante la reunión, el alcalde Manuel Montes defendió las decisiones de su gobierno y reiteró que los trabajadores “son el alma de la administración”. Sin embargo, al mismo tiempo, lanzó mensajes que, para varios asistentes, sonaron contradictorios y hasta preocupantes, pues se mencionó que la mayor parte del presupuesto se destina a sueldos y salarios y servicios de salud.
Por un lado, insistió en que “los trabajadores no perderán ningún derecho”, que la salud es “lo más importante” y que “ningún caso quedará desatendido”. Pero por otro, dejó frases que generaron inquietud: “Somos muy pocos los que estamos aquí, pero absorbemos la mayor parte del presupuesto municipal… No hay que acabarnos la vaca, porque de tanto ordeñar, se acaba”.
El presidente municipal argumentó que la administración enfrenta presiones financieras graves, pues de los 400 millones de pesos de presupuesto anual -100 millones menos que la administración anterior-, una proporción muy significativa se destina a salarios, prestaciones y servicios médicos. Según Montes de la Vega, “si no ordenamos el gasto, el municipio puede llegar a la bancarrota”.
“LOS QUE PERDERÍAN SON LOS TRABAJADORES”
Posterior a la reunión, en entrevista, el alcalde abordó el tema del posible estallamiento de huelga por parte del sindicato. Su mensaje fue directo: “Quienes perderían con una huelga serían los propios trabajadores, porque dejarían de percibir su salario”.
Este pronunciamiento, lejos de calmar los ánimos, ha sido interpretado por algunos sindicalizados como una advertencia velada, ya que en redes sociales y chats internos, varios trabajadores expresaron sentirse “presionados” y “desinformados”.
LOS REGIDORES: LLAMADOS A LA CALMA Y APOYO CONDICIONADO
Cabe recalcar que durante la sesión, los regidores Luis Martín Herrera y Lucy Zarazúa intentaron ofrecer un mensaje conciliador, aunque también dejaron claro que la postura oficial es respaldar el esquema actual del servicio médico.
Luis Martín Herrera subrayó que la reunión buscaba “aclarar rumores” y negar que se estén retirando derechos adquiridos: “Nadie les está quitando beneficios, pero necesitamos que presenten quejas formales, no solo verbales, para darles seguimiento”.
Lucy Zarazúa, por su parte, defendió la legalidad de la adenda aprobada semanas antes por el Ayuntamiento, que establece un nuevo protocolo de atención médica: “El derecho a la salud es prioritario. No hemos negado ningún pago de medicamentos, consultas o cirugías. El problema es que hay información confusa y necesitamos trabajar juntos para resolverlo”.
La dirigencia sindical no estuvo presente en la reunión, pues habían acudido a Guanajuato para seguimiento del tema en tribunales, lo que dejó sin respuesta muchas dudas y tensiones sobre la mesa.
De acuerdo con documentos revisados, la inconformidad sindical se centra en la Clínica Santa Lucía, actual prestadora del servicio de salud, donde los trabajadores han denunciado diversas irregularidades, como falta de atención adecuada, largas esperas, falta de atención especializada, desabasto de medicamentos y procesos administrativos poco claros para el reembolso de gastos médicos.
El gobierno municipal, por su parte, insiste en que el modelo es financieramente inviable y que se analiza migrar a un esquema de atención mediante el IMSS, aunque esto aún es solo una propuesta.
LA RUTA HACIA EL TRIBUNAL LABORAL
El Sindicato de Trabajadores Municipales, encabezado por el secretario general Eduardo Briones ha optado por llevar el caso al Tribunal Laboral del Estado. Según trascendió, el pliego petitorio entregado al Ayuntamiento incluye ciertas demandas, entre ellas:
• Garantizar atención médica inmediata y de calidad.
• Ampliar el catálogo de medicamentos.
• Establecer guardias médicas los fines de semana.
• Mayor transparencia en el uso de los recursos destinados a salud.
Hasta ahora, la dirigencia sindical ha evitado confrontar públicamente al alcalde, pero fuentes internas revelan que el estallamiento de huelga es un escenario real si no hay acuerdos en las próximas semanas.
Es importante destacar que la reunión “informativa” de esta tarde evidenció tres problemas centrales:
• Comunicación deficiente
• El Ayuntamiento insiste en que “no se quitan derechos”, pero los trabajadores no confían en la narrativa oficial. La ausencia del sindicato en la reunión refuerza la percepción de opacidad.
• Presión financiera contra derechos laborales
El alcalde Manuel Montes adviertió sobre la posibilidad de “bancarrota” y plantea migrar el servicio y atención de salud al IMSS, pero no presentó cifras claras ni un plan concreto, lo cual genera incertidumbre, pues se ignora el costo de cuotas que el municipio deberá solventar si se acepta incluir a los trabajadores municipales al Seguro Social.
ESCALADA DEL CONFLICTO LABORAL
Con el sindicato llevando el caso al Tribunal Laboral y sin acuerdos claros, la amenaza de huelga es real, misma que afectaría servicios básicos, como recolección de basura, alumbrado, seguridad pública y atención ciudadana.
El gobierno municipal prometió entregar un informe técnico detallado sobre la situación financiera del sistema de salud en la próxima sesión de Ayuntamiento. Sin embargo, mientras no haya acuerdos con el sindicato, el riesgo de parálisis laboral persiste.
San José Iturbide enfrenta un dilema urgente: equilibrar la salud financiera del municipio sin sacrificar los derechos adquiridos de sus trabajadores. Por ahora, la única certeza es que la tensión aumenta y que la negociación debería ser inevitable, pues la vía de una huelga está en camino.