
05/09/2025
A veces un traje reescribe el libreto de la alfombra roja.
1990. Golden Globes. Julia Roberts. Armani. Nadie esperaba “elegancia relajada” en medio del dress code rígido… y, sin embargo, ese traje oversized abrió la puerta a una nueva gramática del glamour.
A finales de los ochenta, Giorgio Armani soltó la rigidez: hombros que no gritan, telas que caen, poder que se siente y no se declara. En 1990, Julia Roberts convirtió esa teoría en imagen: un traje gris que pasó de prenda a statement.
No era un look de ocasión, era una gramática nueva. El gris cinematográfico, la camisa sin ansiedad, la proporción que pide aire. Desde entonces, menos ornamento y más intención: la elegancia se volvió relajada y, paradójicamente, más precisa.
La lección hoy es clara: el traje no compite con el cuerpo, lo edita. Cuando quieras decir “estoy aquí” sin subir el volumen, pruébalo.
¿Vestido icónico o sastre con carácter? Guarda este post y cuéntame cómo lo llevarías.