19/07/2025
HUACHICOLERO ES ASESOR DEL GOBIERNO DE OAXACA EN LA SECRETARÍA DE ADMINISTRACIÓN
Sayda Morales Bustamante
En la opacidad de la burocracia oaxaqueña y la creciente sospecha sobre la penetración del crimen organizado en la política local, surge un nuevo nombre: José Antonio López Ríos, asesor con sueldo oficial de $35,000 pesos mensuales en la Secretaría de Administración del Gobierno de Oaxaca, bajo las órdenes de Noel Hernández Rito, y al mismo tiempo secretario particular del senador de Morena, Antonino Morales Toledo, en el Senado de la República.
Hasta aquí, el doble cargo sería solo un ejemplo más del reciclaje de cuadros y el tráfico de influencias de Morena en los distintos niveles de poder. Sin embargo, lo que sigue es mucho más alarmante.
La noche del 9 de agosto de 2024, López Ríos fue detenido por elementos del Ejército Mexicano y de la Policía Estatal durante una revisión de rutina en la región norte del Istmo de Tehuantepec. La sorpresa de los militares fue mayúscula: López Ríos transportaba 500 mil pesos en efectivo, varios bidones de gasolina presuntamente obtenida de forma ilícita, y una pi***la calibre 9 mm con cartuchos útiles.
Fuentes castrenses consultadas por este medio confirmaron la existencia de fotografías del aseguramiento, mismas que documentan sin lugar a dudas el decomiso y la identidad del detenido. La versión extraoficial señala que López Ríos fue liberado horas después, gracias a la intervención directa del senador Antonino Morales, conocido popularmente como “Nino”.
Esta historia no es anecdótica. José Antonio López Ríos es un operador político clave de Nino Morales en la región del Istmo, y actual dirigente del Frente Único de Comunidades de Oaxaca (FUCO) en Tehuantepec, organización fundada y dirigida durante años por el propio Morales Toledo, y considerada su principal estructura clientelar y de movilización política.
Lo inquietante es que este episodio no es aislado. En diversos círculos de inteligencia y seguridad se ha advertido desde hace años que sectores del FUCO han sido infiltrados por redes de huachicoleo y actividades ilegales vinculadas a la extracción y distribución de combustible robado, así como al control de zonas estratégicas en el Istmo, incluido el área del Corredor Interoceánico.
En 2020, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congeló la cuenta personal de Antonino Morales por sus presuntos vínculos con actividades ilícitas. Se trató de una medida en el marco de la “Operación Agave Azul”, en la que se investigaron redes de financiamiento del crimen organizado a través de funcionarios locales. Aunque la cuenta fue descongelada meses después por razones políticas, el expediente sigue abierto y los rumores sobre su vínculo con el huachicol no han cesado.
La detención de López Ríos no solo refresca estas sospechas, sino que las vuelve más preocupantes en el contexto actual: un senador en funciones con ambiciones de gobernar Oaxaca, rodeado de personajes con expedientes turbios, y un gobierno estatal, encabezado por, silente ante estos hechos.
Mientras tanto, en la Secretaría de Administración, dirigida por Noel Hernández Rito —un funcionario también vinculado al ala dura del morenismo oaxaqueño—, López Ríos sigue cobrando su sueldo como asesor, sin que nadie haya solicitado su renuncia o iniciado procedimiento alguno.
