
21/03/2024
Un día como hoy, pero en 1975, sale a la luz el sexto álbum de TANGERINE DREAM «Rubycon».
Después del éxito de la obra maestra de «Phaedra», los integrantes habían adquirido la fórmula perfecta de composición con sus nuevos sintetizadores. Así, entraron al estudio y sin rodeos, dieron vida a un álbum que se convirtió en uno de los más exitosos, tanto comercial, como artísticamente.
Es una obra que continúa con la arriesgada fórmula de lanzar composiciones largas, con solo dos piezas extensas por lado en su edición original en vinilo, dado que querían plasmar en los surcos todo lo experimentado en las giras de ese año.
De hecho, «Rubycon» es una forma de decir, de forma coloquial “A darle con todo, sin vuelta atrás”, dando a entender el contexto en el que estaban al momento de grabar. El sello y el mundo esperaban con altas expectativas su nuevo trabajo y ellos, como si nada, sacaron uno de nuestros discos predilectos.
Su sonido es oscuro, envolvente e hipnótico. Puro Kosmische musik que había tomado forma en la escuela de Berlín. Tangerine ostenta paternidad directa con este sonido, siendo la cuna de la música electrónica, aquella que vio nacer a grandes sintetistas que luego brillaron como solistas.
Un álbum indispensable para los amantes de la música electrónica con sintetizadores, secuencias, ambient. Dos piezas largas de muchos arpegios, sonidos y viajes electrónicos con los cuales estos alemanes nos deleitan con toda su genialidad y potencia.
«Rubycon» es uno de esos clásicos que no tienen tiempo, ni edad.