
14/07/2025
DE ILAMATLAN, TANTOYUCA, XOCHIATIPAN Y COXCATLAN SON RESCATADOS EN GUANAJUATO.
Una operación sin precedentes dejó al descubierto las condiciones 1nfrahumanas en las que más de 700 personas —incluyendo menores de edad— eran obligadas a trabajar en un rancho agrícola en el municipio de Dolores Hidalgo, Guanajuato.
Las víct1mas, provenientes en su mayoría de estados como Veracruz, Guerrero, Chiapas y Oaxaca, fueron rescatadas por un operativo interinstitucional encabezado por la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE), con el respaldo de la Guardia Nacional, la Policía Estatal, personal del DIF, Protección Civil y la Cruz Roja.
Según los primeros reportes, los trabajadores vivían hac1nados en viviendas improvisadas de lámina y cartón, sin acceso a servicios básicos, expuestos a jornadas laborales agotad0ras, sin contratos ni garantías. Algunos presentaban d3snutrición severa, fat1ga crón1ca e incluso signos de viol3ncia y abandono.
“Trabajaban todo el día por unos cuantos pesos, un plato de comida de sopa y frijoles ballos y un lugar para dormir”, relató un funcionario que participó en el operativo. Muchas de las víct1mas ni siquiera sabían cuánto tiempo llevaban ahí. Algunas familias enteras habían sido trasladadas bajo promesas de empleo digno, y acabaron atrapadas en un sistema que los 3xplotaba sin piedad.
El cateo, realizado el viernes 11 de julio, es parte de una investigación por tr4ta de personas con fines de explotac1ón laboral. También se detuvo a una persona en poses1ón de narcót1c0s, lo que abrió otra línea de investigación por delit0s relacionados con el crim3n organizado.
Hasta el momento, no se ha revelado el nombre del rancho ni de los propietarios, pero la Fiscalía aseguró que ya se están recabando declaraciones y pruebas para llevar a los responsables ante la justicia.
Organizaciones de derechos humanos calificaron el caso como uno de los más grav3s en los últimos años. “Esto no es sólo 3xplotac1ón laboral, es 3sclav1tud moderna”, denunció un activista.
Desde Veracruz ya se han comenzado a identificar personas originarias de municipios rurales que figuran entre las víct1mas, lo que ha encendido las alarmas en comunidades donde la pobreza sigue empujando a cientos a migrar sin saber los riesgos que enfrentan como lo son Ilamatlan, Tantoyuca, Tehuipango.
Este rescate ha reavivado el debate nacional sobre la falta de vigilancia en el campo agrícola mexicano, donde miles de jornaleros continúan siendo invisibles para el sistema, sin derechos, sin contratos, sin futuro en donde los contratistas mediante engaños enganchan en su mayoria a indigenas quienes si no trabajan no les brindan comida, ademas de descontarles cantidades desorbitales.
Las autoridades aseguraron que las víctimas ya están recibiendo atención médica, psicológica y apoyo legal, y que se trabaja en coordinación con los gobiernos estatales para su pronta repatriación y protección.
Apesar de las medida de las autoridades diversos jornaleros aseguran que se encuentran trabajando y no en contra de su voluntad, es de recordar que estos campos son comunmente conocidos como los contratos y las personas son reclutadas mediante mensajes de radio y redes sociales sobre todo en comunidades y municipios de alta pobreza en Mexico.