23/04/2025
ELLA ES LA MONJA GENEVIÈVE JEANNINGROS, AMIGA DEL PAPA FRANCISCO Y QUE ROMPIÓ LOS PROTOCOLOS.
Entre cardenales, obispos y autoridades eclesiásticas que desfilaban para despedirse del papa Francisco, una imagen distinta ha acaparado las miradas dentro de la Basílica de San Pedro: una monja con una mochila verde colgada al hombro que no se movió del féretro del papa Francisco durante toda la ceremonia. Rezaba. Lloraba. Y no hizo falta que dijera una palabra para que su presencia se hiciera inolvidable.
Se trata de Sor Geneviève, una religiosa francesa que se convirtió en amiga cercana del papa Francisco, a quien el Pontífice solía llamar 'l’enfant terrible'. Mientras los representantes del clero se acercaban al féretro en grupos de cuatro y durante apenas unos segundos, ella permaneció en pie, inmóvil, en un acto que nadie se atrevió a interrumpir.
Sor Geneviève no es una monja común. Vive en una caravana, se dedica a ayudar a personas que trabajan en circos y comunidades itinerantes, y durante años llevó a grupos de homosexuales y transexuales a encontrarse con el papa en las audiencias de los miércoles. Su misión ha sido siempre la de acompañar a los marginados, aquellos que muchas veces la Iglesia ha dejado al margen.
Mientras el Vaticano se envolvía en la solemnidad del protocolo, Sor Geneviève se saltó todas las reglas. Se colocó junto al féretro como si fuera su sitio natural, y lo fue. Nadie la movió.