
11/09/2025
Estos últimos días he estado como bloqueada… sin inspiración para escribir, crear contenido o subir cosas como me hubiera gustado. Y claro, esta página es de dos, pero la única que ha estado al pie del cañón es mi amiga Daniela 💕.
El inicio de clases no fue precisamente alentador: una peleando con la rutina y otra buscando espacios para su peque. Y aunque este post no es para hablar de eso, sí quiero contarles algo: me preocupaba mucho no subir nada y dejarle todo el peso a ella. Yo pensaba: “¿qué les voy a mostrar si no me siento inspirada?, ¿qué les puedo compartir si siento que nada me está saliendo como quiero?”.
Y fue ella quien me dijo: “cuéntales eso, porque ser auténticas también significa mostrar las altas y las bajas”. Y tenía razón. A veces me da miedo que se vea como debilidad, pero en realidad es parte de ser reales.
Buscando inspiración esta noche me di cuenta de algo: lo que me inspira ahora mismo no son las ideas perfectas para un post, ni las rutinas bien organizadas (que casi nunca salen como las planeo 🙈). Lo que me inspira es mi amiga.
Porque aunque tropiece o se desanime, siempre sigue adelante. Porque puedo escribirle a las 11 de la noche y sé que me va a contestar (aunque esté cansada). Porque escucha mis audios eternos de 5 minutos sin quejarse, porque me da consejos y porque, aunque yo solo quiera quejarme y no tenga la razón, ella me la da en ese momento 😂.
Así que lo que hoy quiero compartirles no es un carrusel de tips, ni una frase motivacional, sino algo más simple:
✨ Mi amiga me inspira.
✨ Mi amiga me hace más fuerte.
✨ Mi amiga me hace feliz.
Gracias, Dani, por ser mi soporte, mi podcast de confianza, por dejarme hablar hasta que me canse, por armar rutinas conmigo y por empujarme a ser una mejor mamá.
Y si tú también tienes una amiga que es tu soporte en este camino, ¡etiquétala en los comentarios!