09/07/2025
A todos los que somos seguidores del género, nos pegó de una manera u otra. A mi particularmente, me hizo pensar sobre quien me acompañó la mitad de mi vida y me llenó de nostalgia.
Ver al príncipe de las tinieblas en su trono: épico.
Con su taza de té, agua y medicinas listas. Al hablar su voz que se quebraba, pero su canto casi intacto.
Mi historia con Osbourne comenzó probablemente antes de que yo naciera, su música ya era de ley en mi familia.
Mi historia con Ozzy, comenzó en diciembre del 2009, cuando en una navidad llegó en una canasta decorada como si fuera una galleta. Blanco, bonito, indefenso y chiquitito.
En lo que decidía su nombre, estaba viendo la TV, le cambié a VH1 y empezó el video de Crazy Train… donde Ozzy usaba el cabello esponjado y blanco, me hizo sentido. El nuevo integrante de la familia tenía las mismas caracteristicas. Entonces desde ahí comenzamos a llamarle Ozzy a esa bolita de pelos que por años jugó con nosotros, nos acompañó a orar, a dormir, a comer, nos dio paseos y 15 años que no se me van a olvidar.
El sábado todos vimos como Osbourne le decía adiós a los escenarios, yo le dije adiós a Ozzy en diciembre.
Osbourne es mundialmente famoso, Ozzy, bueno… mis mas cercanos amigos hablaban su idioma.
Cuando se despidió tenía una vida entera ante sus ojos, se le notaban las ganas de querer levantarse y seguir echando dsmdr pero su cansado cuerpo le cobró factura, pero también se le notaba lo agradecido que estaba: “thank you from the bottom of my heart”.
A Ozzy lo sueño, a Osbourne lo escucho.
A los dos casi a diario.
Hasta siempre, Ozzy 🖤🦇🐾