
30/09/2025
🧵 Comienzan a verse resultados de correr a Horner junto a sus directores de marketing y comunicaciones, para retomar control sobre las narrativas desde RB Austria. Ahora las historias hablan de resultados deportivos y muy poco de escándalos personales, conflictos entre las partes o reemplazos de pilotos. Algo que a nivel experto en materia de Alta Dirección, comunicación estratégica, relaciones, imagen y percepción pública no nos pasa desapercibido.
En las semanas recientes tuvimos una probadita: Permitieron que VER corriera en otra categoría, hicieron toda una campaña de expectativa para pintarlo como un humilde campeón de F1 que busca un simple permiso para conducir en una categoría regional y consiguieron que los medios atrajeran a la gente hacia una victoria calculada, con uno de los mejores autos de la serie (patrocinado por ellos), donde su mayor competidor en la tabla final fue un piloto de PlayStation, famoso por la película Gran Turismo, casi retirado de las pistas y con poca trayectoria en ellas, ahora veterano y que arrastraba un terrible trauma por el accidente que tuvo en ese trazado.
Por supuesto, nada de toda esta publicidad habría podido ser tan exitosa sin los “expertos” urgidos de interacciones, contenido y de auto-validación, que la propagaron como un hito, y que ha hecho más ruido que muchos de sus triunfos en la F1. Mientras gran parte del “periodismo” se prostituye, pierde su seriedad y objetividad en el análisis y la magnitud de los hechos, RB aprovecha esa necesidad para impactar en una masa que está ávida de historias mágicas, aunque sean mero humo, principalmente cuando Horner y compañía gastaron cualquier cantidad de recursos con los que fueron incapaces de posicionar hitos más grandes en la F1, que una victoria en una categoría casi amateur. Algo que no se le explica al aficionado, por supuesto.
Y, entre todo, el segundo lugar de Mardenborough, es una historia humana que sí se debe destacar, por su origen y contexto, porque a él no se le trata de exaltar mostrándolo grande en una pecera chica, sino que lo suyo ha sido una verdadera lucha de vida, contra las posibilidades y contra todas las circunstancias.
Pero nadie le puede quitar a RB Austria el gran trabajo de marketing y PR que hizo en torno a este evento, y que ha logrado utilizar como simples fans a los medios de comunicación y creadores de contenido, para posicionar a Max mucho mejor de lo que logró Horner y su equipo con la mayoría de los récords de F1 que construyeron juntos.
✍🏼 Tello de Meneses