28/08/2025
Tribunal Electoral reasigna cargos de jueces en Veracruz-Sur solo a mujeres; Castillo Meza posiciona su postura en comunicado
En un giro controvertido, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió los juicios de inconformidad SUP-JIN-855/2025 y SUP-JIN-968/2025, ordenando la reasignación de todos los cargos de Juez de Distrito en materia mixta del distrito judicial 02 Veracruz-Sur para que fueran entregados únicamente a mujeres. La decisión, que nunca estuvo prevista en las reglas originales de la elección, ha generado reacciones encontradas.
El principal afectado es Pedro Pablo Castillo Meza, quien aseguró haber sido el hombre con mayor respaldo ciudadano en el proceso. En un comunicado público expresó que la resolución significó “desconocer la voluntad expresada en las urnas” y sustituirla por una interpretación judicial que cambió las reglas después de celebrada la elección.
Castillo Meza subrayó que su crítica no va dirigida contra la paridad de género, principio que dijo respetar, ni contra las mujeres que participaron dignamente y respetaron las reglas originales, sino contra la manera en que el tribunal aplicó dicho criterio. “El problema radica en que la sentencia utilizó la paridad de manera equivocada, arbitraria y desproporcionada, anulando el esfuerzo, los votos y la confianza de quienes participamos legítimamente en esta elección”, sostuvo.
El exaspirante agradeció el respaldo de su familia y simpatizantes, al tiempo que lamentó que una decisión judicial de este tipo pueda minar la confianza en la democracia. Reconoció que la medida le afecta personalmente, pero aseguró que seguirá defendiendo las causas justas desde cualquier espacio que ocupe.
Un precedente polémico
La resolución abre el debate sobre los alcances y límites de la paridad de género en la impartición de justicia electoral. Si bien México ha avanzado en la implementación de medidas afirmativas para garantizar mayor participación política de las mujeres, la sentencia cuestionada pone en el centro el riesgo de aplicar criterios posteriores al proceso electoral, lo cual podría interpretarse como una violación al principio de certeza jurídica.
Con este fallo, el Tribunal Electoral envía un mensaje que, para algunos sectores, fortalece la representación femenina en cargos de poder; sin embargo, para otros, como Castillo Meza, representa un atropello al voto ciudadano y una decisión que erosiona la confianza en las instituciones democráticas.
-Redacción