
06/05/2025
Del metro a la decepción del espectáculo
Este fin de semana nos regaló dos imágenes muy distintas del boxeo: por un lado, la historia que conmovió a miles —la de un joven boxeador captado en el metro, con el cinturón en la mano y la medalla colgando del cuello de su madre. Una escena silenciosa pero poderosa, que transmitía esfuerzo, humildad y sueños en construcción. Por el otro, el espectáculo mediático de la pelea entre Canelo Álvarez y su rival cubano, una noche que debió ser grande, pero terminó dejando un sabor amargo por la falta de entrega, emoción y profesionalismo del mexicano.
Ese joven del metro venía desde Tecámac, seguramente después de horas de combate, cargando no solo el peso del trofeo, sino de todo su esfuerzo. No hubo luces, ni prensa, ni millones de dólares. Solo la satisfacción del trabajo bien hecho y el amor de una madre que entiende el valor real del sacrificio. Esa imagen representa lo que el deporte debería ser: una plataforma de superación, una escuela de vida.
En contraste, la actuación de Canelo fue todo lo contrario a lo que se espera de un referente del boxeo. Más allá del resultado, lo que indignó a muchos fue la falta de actitud, de hambre, de entrega. En lugar de ver a un campeón defendiendo su legado, vimos a un atleta distante, más preocupado por cuidar su imagen que por honrar el ring. Cuando se está en la cima, la responsabilidad no solo es ganar, sino inspirar. Y Canelo falló en eso.
Este contraste no se busca desmerecer la trayectoria del tapatío, sino recordar que el deporte —como la vida— no se mide solo en títulos o contratos millonarios, sino en la autenticidad del esfuerzo. El chico del metro, aunque anónimo, ya es campeón en algo que muchos han perdido: la esencia del deporte como camino de transformación.
Que esta historia viral no se quede solo en un momento tierno. Que sea espejo para los que están arriba y motivación para los que vienen desde abajo. Porque en cada trayecto del metro con los puños cansados, también viaja la dignidad de un futuro campeón.