15/09/2025
RECOMIENDO ESTE LIBRO DEL ANTROPÓLOGO, ABOGADO Y ECOLOGÍSTA MARIO RIZO ZELEDÓN:
"1907: RUBÉN DARÍO EN LEÓN".
Una Enciclopedia nacional e internacional en el contexto exantes, durante y expost a la vida de Rubén Darío, que parte de un encriptado texto.
A continuación les resento mi análisis.
1907 RUBEN DARÍO EN LEÓN
Su encriptado mensaje en el Teatro Municipal: A propósito del “nicaragüense”, del “matagalpés” de Ángel Ganivet.
Libro de Mario Rizo Zeledón
Cinco meses ya auscultando este ensayo del antropólogo, abogado, analista literario y poeta, Mario Rizo Zeledón, el que he hasta descuadernado para asimilarlo, pues es una enciclopedia surgida de un micro texto encriptado: “Navigare necesse est, vivere non est necesse”, con una sucesión de microhistorias y bisecciones, tal como lo señala en su metodología, aplicando la antropología forense, a lo que agrego, autopsia legal, autopsia literaria y “autopsia espiritual” (esta última que retoma del mismo Darío) y la que el mismo Mario también aplica en el campo esotérico.
En el “navigare” de Rizo, en sus autopsias -por su objetividad y descubrimientos- no perdona ni a moros ni a cristianos; a “darianos o dariístas” que -según disque apasionados por la cursilería y otros- soslayan duras y crueles verdades de los detractores envidiosos de Darío, poetastros y politiqueros (tema que Rizo trata científicamente); hasta el oscurantismo eclesial: pasando por el Vaticano, el Arzobispo de Nicaragua, Monseñor Lezcano, la Liga y Cofradía Católica de los “Vanguardistas“ Granadinos. Los enrostra al negarle el acceso a la educación a (mamá de Rubén) y al mismo Darío, quien incluso, bajo la persecución desatada por esta institución se le negó la beca de estudio y tuvo que huir a el Salvador, en plena adolescencia; como también, la persecución mundial de El Vaticano que publicó el decreto “Lamentabbili sane exitu” y “Pascendi Dominici Gregis”, declarando al modernismo, “síntesis de todas las herejías”.
Más, Rizo, al Obispo de León, Simeón Pereira y Castellón, le da su lugar justo por preponderante “Misa de Príncipe y Noble”, que este le da en su exequias a Rubén Darío; Misa Solemne, al que Mario Rizo Zeledón le llama “Sortilegio” y que data así: el día 13, Magno oficio en el altar mayor, y diez misas simultáneas en las capillas laterales; responsos en las doce iglesias activas y misas rezadas; para un total de 23 misas de mu**to; precedido de un réquiem el día 12.
Cierro esta sección con el relato de Mario Rizo, que “al morir Darío, cerrando los ojos, y estando de la mano amiga del poeta Santiago Arguello, se escuchó en todo León el retumbo del volcán Momotombo”.
Esta obra navega por todo ese ambiente politiquero en que se sumió la nueva república, siendo Darío un porta lira, liberal por libertario y unionista en el sentido personal, amplio y visionario: “quién no desea la Unión de estas naciones”, dirá. Al respecto considérese que Darío elaboró el Prólogo el Pacto de Unión. En varios poemas reitera la “NECESSE UNION”, por ejemplo en UNION CENTROAMERICANA, de diferentes maneras, una de ellas, esta.: “Cuando las plumas juntas forman un ala, entonces, de los altos espíritus en pos es cuando baja y truena la voluntad de Dios”.
Tratando siempre sobre su filosofía y virtud sobre la política y la amistad, tratados en sendas secciones en este estudio, lo resumo con la cita de este libro, visto que ella integra ambos aspectos; en la crónica de Darío: “José María Vargas Vila”: “Enemigo mío fue, aquel hombre de tanto talento, porque hice una visita…al Presidente Núñez… Vargas Vila aborrecía a su enemigo político. Y Vargas Vila me hirió injusta y duramente, sin saber que, para mí, todos los presidentes, todas las políticas, todas las patrias, no valen uno solo de los rayos del arte, prodigioso y divino…” Luego Vargas Vila contestó, convirtiéndose para siempre en su mejor amigo:”…Es el genio de Darío lo que ha hecho mi admiración por él…”; y así lo prologó, lo recomendó, lo defendió y le sugirió: “Navigare est necesse a tu patria”; y de ese estímulo se da esta visita y este discurso de 1907, en el Teatro Municipal de León, del que Mario Rizo sustrae apenas un párrafo de 9 líneas, con el que cierra con la frase latina “encriptada” de Plutarco: “Navigare est necesse, vivere no est necesse”.
Naveguemos, pues: “Navigare necesse est, vivere no est necesse”. Vivir la vida por vivir carece de esencia espiritual. El estudio destaca que Rubén cruzó diez veces el atlántico y ocho veces el pacífico. Esta frase, su origen, su sentido y usos a través del tiempo, desde Pompeyo (76-48 a.C.) que arenga navegar, pasando por Plutarco (45-120 d.C.) ya con esta frase determinativa. Le encuentro sentido desde Darío por su alta hiperestesia, pues en sus viajes por diferentes culturas, en sus crónicas, en sus narrativas y poemas, compenetra en el alma de los pueblos; por ejemplo, cuando apenas caminaba en la avenida portuaria de Barcelona describió el Ser del Barcelonés, con ese aire necesario independentista, manifiesto en el levantamiento del año 2017, o la descripción de la cubana en sus poemas “La Negra Dominga” y Chichá, o en la narrativa “La Miss”, que trata de una “ligera” dama inglesa con quien conversa a bordo de un barco en Puerto Brasileño, o la damas del Rhin y Luxemburgo; etc.. Eso es antropología espiritual, como lo es desde la lingüística, donde para él “toda palabra tiene un alma”, y se ocupó de integrar palabras nativas de los diversos países de la América, con la que puso en orden a los puristas académicos españoles: “somos otros, en espíritu, ansias y lenguas”.
Para el caso legal, de violación de derechos humanos, Rizo acusa legalmente: al Coronel Félix Ramírez Madregil (último apellido expósito), por el arrebato del niño Darío, y destaca el impacto neurológico en el infante ante el bochorno trágico implícito en esos casos; el daño en su alma para el resto de su vivir, más, con la superposición de la personalidad del Coronel (coronelato le llama Mario) imponiéndole se nombrara Félix Ramírez, y aunque el Panida halla retomado su devenir nombrándose taxativamente Rubén Darío, como nombre oficial en su viajes y en su movimiento de la modernidad, no obstante, este asunto fue parte de su infortunio a la que él se propuso un auto psicoanálisis que no se logró efectuar.
Esta obra de Rizo es extensa e intensa, de mucha valía en todo lo contenido, micro relatos todo el mosaico de datos del ambiente local, nacional e internacional en la época de Darío propiamente dicha, e inmediata: exantes y expost, y aquello que no está escrito, con el ojo avizor, el autor, fácilmente lo devela.
Para continuar tomo dos elementos que se contienen en uno, y ya mencionados: “la autopsia espiritual”. Uno, la manera cómo vivió el sentido de la amistad, y dos, la aplicación del análisis introspectivo. Mismos que se relacionan con Ganivet, referido de una manera onírica en una aplicación literaria, por lo que lo pone siempre a la vanguardia de novedoso. Más antes voy referir un libro especial de Darío intitulado “El mundo de los sueños”, en el cual, él, se desdobla en dos espíritus humanos: alfa y omega. El primero representa el antiguo conocimiento sobre la naturaleza oculta del ser mediante la Teosofía, y el segundo, el de los avances científicos modernos, en el caso de la aplicación de las nuevas tendencia médica como la psiquiatría. Al respecto apunta Mario Rizo: “Darío hace una entrada formidable en la mente humana…, cuando la psiquiatría era apenas reciente…y dice, después de leer uno de los libros del psiquiatra y criminólogo Lombroso; cita a Darío: “… A cada persona de mi conocimiento le aplicaba la observación del doctor italiano…” y cierra: “cuando la literatura ha hecho suyo el campo de la fisiología, la medicina ha tendido sus brazos a la región obscura del misterio”. Al respecto, traigo el siguiente texto del libro “El mundo de los sueños”, antes referido: “Llegará el día en que la religió y la ciencia caminarán de la mano”.
Darío aplicó ese método de análisis de Lombroso a los poetas incluidos en su libro “Los Raros”; aunque en él. Ganivet no está incluido, Darío por su parte analiza su rareza, su zona oscura, y lo cita en su micro relato de 1907 en el Teatro Municipal de León de Nicaragua, en su retorno. Ganivet fue diagnosticado como maniaco persecutorio y atacó a Rubén Darío socarrona y solapadamente en sus dos obras: “El Idiarium” y “Epistolario”. Y, atrevidamente resumo las anotaciones de Rizo: al referirse al “desgraciado hombre y matagalpés”, consistente en una burla hacia Rubén Darío, que después lo modifica señalando que era de Managua, pero siempre burlonamente. Darío lleno de paciencia, bajo un concepto especial que tenía del ser humano, del cual pretendía siempre la amistad, sin dejar su firmeza y dignidad, a como dijera: “Ese hombre de Matagalpa del que dice no saber su nombre, está a su altura, ya que cuenta con ojos de viajero y ve en las constelaciones como él…” y proyecta el acertijo en la frase “Navigare necesse est, viviré non este necesse”. Darío en vez de despotricar contra él, fuera de la identificación psiquiátrica que le hizo, valora su capacidad creativa, literaria; igualmente a como se refirió a Vargas Vila y lo atrajo a su amistad, solo que Ganivet en 1907 ya había mu**to.
En el análisis literario que hace Rizo de la frase “Navigare necesse est, viviré no est necesse”, metáfora que llama a seguir adelante y, que Plutarco con ella promueve pautas de comparación entre virtudes y defectos, método que él llama syndrysis; al respecto dice Rizo: “Y es tal este parrafito de Darío, diseñado como todo a propósito, como para hacer del mismo un breve tratado, en un formato de un mini relato, denso, de elocuencia, de enigma literario”. Mario acierta en llamarle nano literatura por micro relato, por incrustado, donde la palabra “matagalpés”, simultáneamente la usa para dispensar la ofensa de Ganivet y más bien elogiarlos póstumamente, y a su vez para elogiar
al Matagalpino Samuel Meza, su par de adolescencia, al que Edelberto Torres lo registra como poeta destacado en León entre 1881-82; periodo en que Darío oscilaba de 14 y 15 años, de la misma edad de Meza, a los que Mario los signa Gemelos astrales.
He aquí la revelación de Mario Rizo, porque tanto Darío como Ganivet fueron viajeros, o no solo viajeros allende los mares y naciones, pues sobretodo navegantes del infortunio y de la creación. De ahí la cita latina: “Navigare necesse est, viviré non est necesse! Los contrapuntos entre virtud y defectos están implícitos en estas pequeñas secciones que he referido: La iglesia lo persiguió y la iglesia lo nombro príncipe; la política lo persiguió y en la política latinoamericana Rubén continua siendo Cóndor, Vilas, Ganivet y los Granadino lo atacaron y luego lo reconocieron, el Coronel Ramírez lo absorbió con Félix y como Ave Fénix resurgió como Rubén Darío.
Con esta frase de Darío, conque inicia este ensayo !Mi amado amigo mío, Mario Rizo Zeledón!:
“Navigare necesse est, vivere non est necesse´”,
Frase que en relación a ella Juan Ramón Jiménez le llamó: “…raro monstruo marino y nostálgico navegante”
que es Vivir sentido del mismo Darío, que complemento y apenas concluyo el inicial estudio de esta enciclopedia que nos entrega Mario:
“Por atavismo griego o por fenicia influencia,
siempre he sentido en mí ansia de navegar,
y Jasón me ha legado su sublime experiencia
y el sentir en mi vida los misterios del mar”.
(Retorno)
Adolfo Isaac Sánchez Salgado
“Viajar es vivir, es preciso pues viajar”
Sutiaba, Nicaragua, Septiembre 3 de 2025