14/10/2025
Casa de Refugio
En la biblia se menciona las ciudades de refugio en el antiguo testamento, se designaron con el fin que sirvieran de refugio para personas que habían cometido algún as*****to, pero de forma no intencional. Estos lugares servían para que la persona, pudiera tener un lugar seguro, si escapaba de la venganza o de una pasada de cuenta, como se dice, por parte de los familiares del difunto. Había ciudades de refugio como: Cedes, Siquem, Hebrón, Beser, Ramot y Golán.
Salmos 61:4 PDT dice: “Quiero vivir para siempre en tu casa, refugiado debajo de tus alas.” Podemos comparar a Dios con esas ciudades de refugio, donde encontramos protección, seguridad, paz, tranquilidad, donde no hay condenación, etc. La casa del Señor es el templo, lugar donde habita su presencia, pero ahora no solo hay templos edificados por hombres, sino templos vivos en donde mora la presencia de Dios.
Si buscas un lugar seguro, esa es la presencia de Dios. Si buscas protección, esa la tendrás al lado del Altísimo. Si lo que buscas es la paz verdadera, esa solo proviene del tiempo que pases en compañía del Señor. Es Él la fuente que pueda llenar cualquiera de tus necesidades.
Mas allá de eso, Dios, es la torre fuerte para tu vida, “El nombre de Jehová es torre fuerte; a ella corre el justo, y es levantado" Prov. 18:10. No corras al lugar inadecuado, corre a Dios, será tu torre fuerte, fuerte para defenderte de tus adversarios, de los que te acusan, de los que te quieren dañar, de los que te causan dolor y sufrimiento, de los que te abaten.
El Señor puede ser nuestro escondite en el día de la angustia y su palabra el ancla inconmovible, que hará que tu barca no se hunda cuando haya tempestades azotándote. "Tú eres mi escondite y mi escudo; en tu palabra he puesto mi esperanza" Salmos 119:114.
Dios Padre, Cristo y su Santo Espíritu, serán tu sostén y fortaleza. Así como permanece la palmera, aun en medio de vientos huracanados, así será tu fortaleza en medio de las tribulaciones, cuando Dios sea tu amparo. El refrán dice: el que a buen árbol se arriba buena sombra le cobija, no?, si tu amparo es Dios, tu estarás seguro, tus asuntos estarán seguros, tu familia estará segura. "Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones" Salmos 46:1.
Debemos hacer de Cristo, de su presencia nuestra casa de refugio, para el día malo, para el día de angustia. Para el día de soledad, el día sin fuerzas, el día de la persecución, Dios sea nuestra casa de refugio... Él nos salve... Él nos libre. Con Él, como fortaleza, nunca seremos derribados.
