24/09/2025
|| Jacob Valero Mariño, cirujano dentista, empresario y promotor social, será precandidato a diputado por el partido “Venceremos” en las elecciones 2026.
El cirujano dentista Jacob Valero Mariño, con estudios de maestría en Ciencias Sociales, anunció su precandidatura a diputado por el partido político Venceremos rumbo a las elecciones generales del 2026.
Valero Mariño es un empresario andahuaylino que salió adelante con esfuerzo desde abajo y que hoy comparte los frutos de su trabajo con quienes más lo necesitan. A lo largo de su trayectoria ha donado y gestionado equipos médicos odontológicos para colegios e instituciones y municipalidades en distintas regiones del país y, sobre todo, en la región Apurímac, además de impulsar campañas de salud bucal preventiva. También ha apoyado la cultura y el deporte, llegando a ser presidente del Patronato Chanka en Andahuaylas, y se ha convertido en un permanente impulsor de la marca Andahuaylas.
Actualmente es gerente general de una empresa de equipos médicos odontológicos y de los consultorios Jacobodent, desde donde sigue aportando al desarrollo de la región y del país. Su decisión de ingresar a la política responde a su compromiso de trabajar por la igualdad, el desarrollo y la construcción de una sociedad más justa.
El partido “Venceremos” nace de la alianza entre el movimiento Pueblo Libre y Nuevo Perú, que presenta como candidato presidencial a Vicente Alanoca Arocutipa, quien muy pronto estaría arribando a la región Apurímac para presentar sus propuestas.
El partido “Venceremos”, lleva como símbolo la hoja de coca, que tiene un fuerte valor cultural, social, económico y simbólico en el Perú, y representa vida, identidad, resistencia y justicia social para los pueblos andinos. Se ha convertido en una bandera de identidad cultural y de resistencia indígena frente a la marginación histórica de los pueblos andinos. Además, como símbolo de unidad, representa a todas las regiones del país, con énfasis en el sur andino, al que consideran históricamente marginado y olvidado por el poder central.