16/10/2022
(Conciencia Crítica)
Señor Ing. Julio Chávez R.
CARTA ABIERTA AL ALCALDE ELECTO DE CELENDÍN
De mi consideración:
Bien sabemos que el Perú desde sus inicios como república es un país a medias (y esto…), considerando las abismales desigualdades socioeconómicas, la corrupción, la discriminación, la informalidad y las felonías. Por eso mismo los procesos electorales obligatorios son “eructos liberales” de la espuria constitución fujimorista. Sin embargo hay una fórmula pos elecciones que puede nutrir la conducta política: realizando obras necesarias y por años reclamadas, y sin llevar indebidamente un centavo al bolsillo. ¿Será posible?
Es en las provincias donde podemos encontrar el eslabón político perdido. Celendín podría ser uno de los primeros ejemplos del buen manejo de la cosa pública, en función del desarrollo; y no el crecimiento de cemento, de edificios que proyecten sombras de pocilgas. Los celendinos no merecen vivir expresamente en una barriada con ínfulas de modernidad. Y cuando digo celendinos me refiero a todos, a los que nacieron en la provincia, a los que vinieron a vivir aquí y a los visitantes. Hoy a su hermoso plano (“como un tablero de ajedrez”) se a humillado... Y algo peor, la contaminación que genera los cientos de mototaxis, apenas permite una bocanada de aire fresco.
Acabo de estar cerca de un mes en Celendín, he caminado sus calles de arriba abajo y sus rincones; he conversado con unos y otros. Hay en ellos indignación y rabia social. Pero también sugerencias que por la presente hago mías.
He aquí algunas de peso liviano, sencillas pero imprescindibles:
Mudar el rostro arquitectónico de la ciudad hasta donde la norma posibilite, que en buena cuenta significa la decisión del pueblo.
Convertir el jirón 2 de Mayo (desde la Alameda hasta Chacapampa) en zona peatonal, con dos bancas en cada cuadra y en el centro de cada una un círculo a modo de mini jardín.
Convertir la colina San Isidro en un hermoso jardín colgante...
Celendín tiene nombres de calles mudas, que no evocan nada significativo y que pueden ser reemplazados con nombres de personalidades ilustres que han dejado espíritu en la provincia: Armando Bazán, Garrido Malaver, Alfonso Peláez, Pedro Ortíz Cabanillas, entre otros.
Establecer los sábados de ajedrez en la Plaza de Armas. Los domingos literarios Cuenta Cuentos para niños en diferentes plazas y lugares especiales.
En la Fiesta Patronal de julio (además de corrida de toros, misas y castillos) debe implementarse teatro, conversatorios, conferencias, exposiciones de pintura y feria del libro por las noches.
Como ve señor alcalde, no se trata de obras de otro mundo. Todas son factibles, con la finalidad de resucitar la cultura y el buen gusto nuestro. Seguro que también habrá sugerencias de mayor envergadura ligadas a la producción y al turismo, que no tardarán en llegar a su despacho.
Algo más: permanente coordinación con los distritos. Tomar distancia (de años luz) de quienes han sido alcaldes y funcionarios en primera línea.
Su hermano Zenón (buen lector, mejor profesor y excelente ser humano) solía repetir el poema de Machado: “caminante no hay camino, se hace camino al andar”.
Que en esta oportunidad signifique apartarse de la jungla de intereses.
Conciba usted su gestión, como un vivero creador. Y reúna sus pensamientos para decirse que lo vivo de la vida, son las luchas.
Atte.
Próximo articulo: Cargamontón nauseabundo…