20/04/2025
¡ADIÓS, DIANA! JOVEN PIURANA PIERDE LA VIDA EN TRÁGICO ACCIDENTE EN LA CARRETERA PIURA-CHULUCANAS
Piura. La vida de Diana Maribel Bonilla Ludeña se apagó de forma abrupta y dolorosa este sábado por la tarde, dejando una herida abierta en todos quienes la conocieron y amaron. Una joven llena de sueños, de alegría y de amor por su familia, que vio truncado su futuro en un brutal accidente en la carretera Piura-Chulucanas, a la altura del caserío Santa Rosa.
Diana, de apenas 29 años, viajaba como acompañante en una motocicleta Yamaha MTN 320 de placa 2295-PP, conducida por Ronal Huamán Huaches. Eran las 5:20 p.m. cuando, en circunstancias aún bajo investigación, fueron violentamente embestidos por una minivan de la empresa Blessing Express E.I.R.L. de placa M60-566.
El impacto fue devastador. Diana salió despedida varios metros fuera de la vía y perdió la vida instantáneamente. Su compañero quedó gravemente herido y fue trasladado de emergencia a un hospital en Piura, donde su estado continúa siendo delicado.
La noticia de su partida estremeció a quienes la conocían: Ella era egresada de Ciencias de la Comunicación de la UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA, actual estudiante de Idiomas en la Universidad Cesar Vallejo_ Piura _ ESCUELA IDIOMaS, Diana era una joven de espíritu libre, alegre, sensible y soñadora. Amaba a su madre y a sus hermanos con un amor incondicional, como solía demostrar en cada publicación que compartía en sus redes sociales.
Su vida también estaba marcada por una profunda empatía hacia los más vulnerables: recogía y cuidaba perritos abandonados, como su querida "Cuchita", a quien rescató de las calles. Soñaba con viajar por el mundo, y ya había recorrido lugares como Machu Picchu, Arequipa y Trujillo, entre otras, donde su sonrisa iluminaba cada fotografía.
Faltaba tan solo un mes para que Diana celebrara sus 30 años de vida. Un cumpleaños que ahora su madre y sus dos hermanos recordarán entre lágrimas y recuerdos imborrables. Era la mayor de sus dos hermanos, su ejemplo, su pilar emocional.
"Mi hija era alegría, era ternura, era mi compañera de vida", expresó entre sollozos su madre, quien ahora llora la ausencia de su primogénita.
Las autoridades vienen realizando las diligencias correspondientes y recopilando testimonios en la zona. Testigos aseguran que fue la minivan quien habría cometido la imprudencia fatal. Mientras tanto, Piura llora a una de sus hijas: una joven que, con su luz, dejó huellas imborrables en los corazones de quienes la conocieron.
Diana Bonilla Ludeña no solo deja un vacío en su hogar, sino también en una comunidad que hoy lamenta que un alma tan noble haya partido de forma tan injusta y prematura.