
13/07/2025
SACABAN S/ 450 MIL AL MES EXTORSIONANDO A CHOFERES EN AREQUIPA, JULIACA Y PUNO.
Intervención. Treinta y tres fiscales y decenas de policías de Lima, Arequipa y Puno detuvieron a doce integrantes de banda dedicada a extorsionar a transportistas.
La Fiscalía Especializada contra la Criminalidad Organizada de Lima desarticuló una banda de extorsionadores que cobraba cupos para que minivanes puedan circular con libertad entre las ciudades de Espinar, Puno, Juliaca y Arequipa.
Se trata de la mayor organización delincuencial que tenía entre sus miembros a hampones de diversas partes del país. Se agrupaban con objetivos específicos.
El operativo inició a las 3 de la madrugada de ayer. Participaron agentes policiales de Lima, Arequipa y Puno. Se detuvo a doce personas.
La investigación fiscal inició en 2018, pero se tenía conocimiento de que esta organización operaba hace 8 años y sus integrantes habrían amasado S/ 43 millones, producto de la extorsión y cobro de cupos.
El coronel PNP Nicasio Zapata explicó que la organización criminal coaccionaba a los empresarios del transporte informal que cubren las rutas Puno-Arequipa, Juliaca-Arequipa y Arequipa-Espinar.
La organización estaba dirigida por José Antonio Huallpa Anccasi, alias Pacay, y Noelia Trinidad Japura Cruz, conocida como la Reina del Sur o Rubí. Esta última no pudo ser ubicada por las autoridades.
En 2016 esta mujer también fue detenida en Arequipa durante un megaoperativo por sicariato y extorsión.
El resto de detenidos son Napoleón Alfredo Ticona Roldán (Wawito), Víctor Martín Nina Gonzales (Niña), Edwin Mamani Zapata (Panacho), Edgard Ewerthon Rufasto Guillén (Gallo), Luzmila Cruz Mamani (Pildorita) y María Idelsa Quispe Vilca (Negra).
Asimismo, Eloy Paye Vilcanqui, (Eloy), Nilda Vanesa Adco Yanqui (Vanesa) Freddy Henry Arellano Mendoza (Arellano) Edwar Ernesto Vilca Miranda (Pitbull) y César Augusto Merma Huacasi.
Ganancia ilícita
Para operar, esta organización creó 15 empresas falsas, con las que comenzó a agremiar a dueños de minivanes y empresas. Es ahí cuando empiezan a cobrarles a sus agremiados por el derecho a circular. Solo en un día podían juntar 15 000 soles y cerca de S/ 450 000 mensuales.
Si se negaban a pagar, golpeaban a los transportistas, destrozaban sus unidades e incluso atentaban contra sus vidas.
Sus agremiados solo tenían autorización para dar servicio de turismo, pero le sacaban la vuelta a la ley haciendo servicio interprovincial. La mafia aprovechaba la necesidad de trabajar de los transportistas y terminó por apoderarse de las rutas.
Se les investiga por la muerte de varios dueños de unidades y empresarios de transporte. Los asesinatos se habrían dado en medio de grescas, en las ciudades de Arequipa y Puno.
En uno de los inmuebles allanados, se encontraron dos unidades vehiculares, de placas V9S-954 y V5K95. Los propietarios de los vehículos habrían mu**to a manos de la organización, pero seguían ofreciendo el servicio de transporte. Los homicidios son materia de investigación.
La organización también presionaba a conductores, para que se afilien a determinada empresa; si no lo hacían, atacaban a sus choferes y unidades.
Cada vez que iban a cobrar cupos, enviaban a ranqueados delincuentes, que tenían amplio prontuario en Lima. Para lograr detenerlos, fue necesario intervenir sus comunicaciones. Participaron en la identificación agentes encubiertos de Lima y Arequipa. Asimismo, varios agentes se infiltraron en la organización.
(Fuente: La República)