28/09/2024
¿El mundo da vueltas?
Reflexiones sobre la protesta y la violencia en el Perú
Cuando el interior del Perú se levantó en protesta contra el régimen de Dina Boluarte, el centralismo limeño decidió ignorar estas manifestaciones, distrayendo la atención pública con noticias menos relevantes y estrategias de desinformación. Miles de ciudadanos de diversas provincias hicieron el sacrificio de viajar largas distancias para hacerse escuchar en la capital, pero en lugar de ser recibidos con atención, enfrentaron la represión del gobierno, que utilizó la fuerza policial de manera desmedida, dejando una huella de miedo en el colectivo.
En la actualidad, el panorama es sombrío. Los habitantes del cono norte de Lima viven aterrorizados por el auge de mafias que extorsionan a las empresas de transporte, un problema que ha escalado a niveles alarmantes. A pesar de la gravedad de la situación, las autoridades parecen ser cómplices en este ciclo de violencia, sin tomar medidas efectivas para restaurar la seguridad y la confianza de la ciudadanía.
Ahora, nuevamente, se escucha el clamor por la destitución de Boluarte. Pero surgen preguntas inquietantes: ¿por qué esta indignación resurge solo ahora? ¿Acaso no fue suficiente la violencia ejercida durante las manifestaciones pasadas? La comunidad está dividida, y muchos se cuestionan si los hermanos de provincia deberían unirse en futuras protestas.
El futuro de la protesta en Perú se vislumbra incierto, y la respuesta de la población será crucial para determinar si la historia se repite o si finalmente se generan cambios significativos en el sistema político.