21/08/2025
Riquelme se humilla solo: Usa su gestión de hace dos años como interino para tapar que es un concejal inútil, ineficiente. Tras críticas de la ciudadanía
Capiatá: La última sesión de la Junta Municipal del pasado jueves fue un insulto para el pueblo capiateño, transformándose en un bochornoso acto protagonizado por el concejal José Riquelme ANR.
En lugar de trabajar, el edil monopolizó el micrófono durante casi una hora para dar un informe de gestión de su interinato como intendente, un cargo que dejó hace casi dos años, todo para responder a publicaciones en redes y criticas ciudadanas a su gestión.
Su discurso, un burdo intento de auto-elogio, fue una bofetada para sus colegas, visiblemente hastiados de él, y una clara señal de su total desconexión con la realidad de la ciudad.
La patética defensa de Riquelme, lejos de justificar sus acciones, solo sirvió para exponer su inutilidad, e ineficacia
Aseguró ser un benefactor generoso que siempre realiza donaciones, incluso una o cuatro veces más que el millón de guaraníes propuesto para el Día del Niño por su colega Bernardo Sosa. Sin embargo, este medio tuvo acceso a la lista de aportes de los concejales, donde su nombre aparece sin un solo guaraní aportado. La misma farsa se repite con el Club Deportivo Capiatá; la propuesta de donar fue realizada por un colega de su mismo equipo político, liderado por Erico Galeano dueño del club y estadio Capiatá. pero su apoyo monetario también brilló por su ausencia.
Sus palabras son promesas vacías que se desvanecen ante la más mínima prueba.
Pero la hipocresía de Riquelme va más allá de las donaciones. En su discurso vendió una imagen de gestión exitosa, convenientemente "olvidando" que su primer acto como intendente fue un despido masivo e injustificado de cientos de trabajadores, que eran sustentos de familias y quedaron sin sus ingresos.
Esta medida, motivada por la necesidad de acomodar aparentemente a sus amigos, recomendados y operadores políticos, sumió a la Municipalidad en un pozo de demandas y acuerdos laborales. El municipio se vio obligado a gastar millones en indemnizaciones, un dinero que le pertenece al pueblo y que debería estar invertido en obras, no en pagar las consecuencias del egoísmo político de Riquelme.
La actuación del concejal Riquelme durante la sesión refleja una aparente desconexión con su función.
Su obsesión por un pasado que ya no le compete y su evidente falta de propuestas actuales demuestran que no está cumpliendo con su labor de proponer y fiscalizar.
Además, su discurso sobre la prevención de la drogadicción carece de credibilidad. Riquelme se ofreció como "agente multiplicador" en la lucha contra este flagelo, pero convenientemente omite su relación política con el senador Erico Galeano, quien está siendo investigado por presuntos vínculos con el narcotráfico.
Esta contradicción pone en tela de juicio la sinceridad de su compromiso con la causa, reduciéndolo a una maniobra para mejorar su imagen pública.
¿Concejal o exintendente? Riquelme sigue confundido.
La actuación de Riquelme es un insulto a los capiateños. Su obsesión con un pasado mediocre, su falta de propuestas y su incapacidad para fiscalizar el presente demuestran que es un parásito de la política. Su lugar en la Junta no es para servir a la ciudadanía, sino para alimentar su ego desmedido.
Sus supuestos "grandes logros" no son más que fantasmas: el proyecto para una sala de urgencias en el hospital distrital nunca se concretó, quedo para la foto y recuerdo.
A esto se suma la venta de humo que Riquelme realiza al alardear la compra de dos ambulancias, las cuales fueron adquiridas con el dinero de los contribuyentes, no de su bolsillo. Lo más grave es que estos vehículos fueron comprados sin siquiera contar con un recurso y plan tan básico para su funcionamiento, como la de un chofer.
La participación de Riquelme en la Junta Municipal se ha limitado a un ejercicio de auto-promoción, mientras los problemas reales de Capiatá deben seguir esperando.
Además dijo se enfocará en el sector privado al no ver futuro en su carrera política.
Vía Capiatá Noticias Digital