15/09/2025
Gobernadora tiene que pedir disculpas Públicas?.
Editorial: La responsabilidad de gobernar exige altura política
Por: Vicente Godoy, periodista (HDN)
Es evidente que la gobernadora del primer departamento, la doctora Liz Meza, no está siendo asesorada con la seriedad que exige su investidura. El reciente episodio, ocurrido durante el acto por el aniversario del Partido Colorado, lo confirma. La explicación posterior de que el video fue “recortado” no logra desvirtuar la esencia de sus declaraciones, pronunciadas en un momento inoportuno y con un tono que evidenció más animosidad que sentido político.
Las palabras de la gobernadora no fueron solo un desliz: se convirtieron en un mensaje divisivo y malintencionado hacia un intendente de la relevancia de Jorge Centurión, jefe comunal liberal de Horqueta. Más que cuestionar su gestión, los dichos de la doctora Meza transmitieron desprecio y una clara falta de preparación para dirigirse en público sobre asuntos políticos sensibles. Este tipo de intervenciones no construye; al contrario, generan quiebres innecesarios y exponen una falta de visión institucional.
La figura de un gobernador, independientemente de su afiliación partidaria, está llamada a trabajar por todos los ciudadanos del departamento. Cuando se actúa con parcialidad o se busca debilitar a un intendente opositor, se vulnera el principio básico de gobernar para todos. El resultado, lejos de restar apoyo a Centurión, fue el contrario: el intendente de Horqueta salió fortalecido ante la opinión pública, que interpretó el ataque como un gesto de injusticia y mezquindad.
La gobernadora Meza dispone de recursos, poder y un cargo que exige grandeza. Lo mínimo que se espera de ella en este momento es una disculpa pública dirigida al intendente Jorge Centurión y a los demás mencionados en su discurso. Más aún, debe explicar con claridad qué mensaje quiso transmitir, porque lo que quedó registrado en video fue percibido como un ataque directo y mal intencionado.
Errar es humano, pero la responsabilidad de un cargo político se mide en la capacidad de reconocer los errores y enmendarlos con humildad. No hacerlo solo profundizará la desconfianza hacia su liderazgo. Hoy, la ciudadanía del departamento de Concepción, así como los seguidores de todo el país, esperan una rectificación sincera y un compromiso firme con la unidad y el desarrollo del primer departamento de la República.
El tiempo de excusas debe quedar atrás. Gobernar implica responsabilidad, prudencia y, sobre todo, altura política.
Fuente:HorquetaDigital
