22/07/2025
Susan Wright, mató a su marido de casi 200 puñaladas ¿Pero ella fue una víctima realmente? Su juicio provocó un debate sobre el abuso, la autodefensa y las motivaciones detrás del crimen.
Pero antes de entrar en los hechos les contare sobre la pareja y que derivó este terrible final.
Susan White conoció a Jeff Wright cuando ella tenía 21 años y él 29. Ella acababa de graduarse de la escuela secundaria y trabajaba como bailarina para mantenerse. Con el dinero que consiguió empezó a estudiar enfermería, pero tuvo dificultades económicas y decidió trabajar en un salón de belleza.
Jeff, en cambio, llevaba una vida de excesos, marcada por el consumo de alcohol y dr**as. A los 30 años se cansó de esta vida y decidió que quería formar una familia. Cuando conoció a Susan, sintió que ella sería su esposa y unos meses después ella quedó embarazada. En 1998, la pareja se casó en una pequeña ceremonia en Houston y tuvieron un hijo, Bradley.
Al parecer, la pareja llevaba una vida perfecta e incluso estaban esperando su segundo hijo. Sin embargo, Jeff siguió siendo adicto a la co***na y, en muchas ocasiones, perdió el control, descargando su enojo con Susan y los niños. Era abusivo y violento siempre que estaba bajo la influencia de dr**as. Susan le rogó que buscara ayuda, pero Jeff se negó a cambiar.
El 13 de enero de 2003, durante una pelea, Jeff agredió sexualmente a Susan y amenazó con matarla. Más tarde agredió a Bradley, lo que dio lugar a otra discusión. No se sabe exactamente qué pasó después, pero lo que se descubrió fue aterrador.
Según la fiscalía, Susan, después de años de abuso y frustración, llegó a su punto límite. Después de acostar a sus hijos, atrajo a Jeff a su dormitorio, donde lo ató con promesas de un momento íntimo. Pero en lugar de eso, liberó toda su ira reprimida. Con un cuchillo, Susan apuñaló a Jeff casi 200 veces.
El cuerpo fue enterrado en el patio trasero de la casa, en un hoyo que el propio Jeff había cavado para instalar una fuente. El crimen recién se descubrió cuando el perro de la familia comenzó a cavar en el lugar y desenterró parte del cuerpo de Jeff.
Durante el juicio, la fiscalía argumentó que Susan no fue víctima de abuso, sino más bien una mujer calculadora que mató a Jeff para cobrar la póliza de seguro de vida de 200.000 dólares. En su defensa, Susan alegó defensa propia y dijo que Jeff la había atacado con un cuchillo ese día.
Manifestó que, durante el enfrentamiento, no pudo dejar de apuñalarlo por temor a que él la matara. Sin embargo, el jurado se puso del lado de la fiscalía y Susan fue declarada culpable de as*****to y recibió una sentencia mínima de 25 años de prisión.
Años más tarde, una ex prometida de Jeff testificó que ella también había sufrido abusos por parte de él, lo que llevó a que se redujera la sentencia de Susan. Fue puesta en libertad condicional en diciembre de 2020 después de cumplir 17 años en la cárcel. Desde entonces, Susan ha mantenido una vida discreta, alejada de los focos mediáticos.