
09/11/2025
Lo que empezó como un medicamento para salvar vidas hoy está en el ojo del huracán judicial.
Ozempic (semaglutida) fue aprobado por la FDA en 2017 para el tratamiento de la diabetes tipo 2, ayudando a controlar la glucosa en sangre y reducir complicaciones graves.
Sin embargo, su inesperado efecto de pérdida de peso rápida lo convirtió en la inyección de moda entre celebridades, influencers y millones de personas que lo empezaron a usar como “la solución mágica” para adelgazar.
👉 El resultado: una explosión en su consumo global y un mercado multimillonario.
👉 El problema: cientos de reportes de efectos secundarios graves, como pérdida permanente de visión, parálisis estomacal y problemas intestinales.
Hoy, más de 2 600 demandas federales en EE. UU. acusan a su fabricante, Novo Nordisk, de ocultar riesgos reales y no advertir adecuadamente a los pacientes. Expertos legales estiman que el costo de este litigio podría superar los 2 000 millones de dólares.