09/20/2025
Hoy, con el corazón lleno de tristeza, me despido de ti desde la distancia, querida hermana Carmen Elena. Tu luz siempre brillará en nuestras memorias, y aunque el dolor de tu ausencia es profundo, quiero recordar los momentos de alegría que compartimos.
Eras una mujer llena de amor y bondad, que tocó la vida de quienes te rodeaban. En cada risa, en cada abrazo, dejaste una huella imborrable que viviré eternamente. Ahora, sé que estás en un lugar de paz, junto a papá, donde el amor nunca se apaga.
Te llevo en mi corazón, y aunque no podamos vernos nuevamente en este mundo, sé que en el paraíso nos volveremos a encontrar. Gracias por cada instante, por ser mi hermana y mi amiga. Que Dios te tenga en su santa gloria. Hasta siempre, hermanita
