12/11/2025
Con dedicatoria a las que se dicen “cristianas”
Tratar bien a las personas, es mucho mejor que recitar de memoria versículos que no practicas.
Ayudar a otros es mejor que ir todos los Domingos a la Iglesia, golpearte el pecho, llorar y hacer todos esos fiascos que hacen.
No hablar de Dios, es mucho mejor que usar su nombre en vano.
Las manos que ayudan son más nobles que los labios que rezan.
Ayudar a las personas que amas es fácil, lo difícil es ayudar a quien te da igual y más aún a quien no te agrada.
No hacer a otros lo que no te gustaría que te hagan a ti, es mucho mejor que la excusa de lo imperfecto que es el ser humano y la seguridad del perdón de Dios, para ser una mi**da de persona.