16/12/2025
“La Soledad – La Solitud y La Sociabilidad.”
Por Donald Márquez
En los inicios de la Humanidad, el Mundo era un lugar hostil.
Por ende, la necesidad de compañía se hizo imprescindible.
Con el devenir del tiempo nuestro cerebro se fue desarrollando, formando lazos sociales, interacciones grupales, etc.
Nuestro instinto de supervivencia nos motiva a buscar la compañía de los demás congéneres.
Por eso, la soledad, el rechazo social, causan tanto tormento, temor y malestar en cada uno de nosotros.
Siguiendo al Conferenciante Español Borja Vilaseca, digamos que la Soledad (ese sentimiento que se padece solo o en medio de una multitud), está considerada como uno de los mayores desafíos a vencer para la salud de todos y cada Ser Humano de nuestra época.
Irónicamente hoy en día, cuanto más desarrollada tecnológicamente está nuestra Sociedad Universal, más solos y aislados nos sentimos: esa es la Solitud.
Al no haber sabido amarnos a nosotros mismos –sin caer en el Narcisismo, el Ego o la Soberbia–.
El único suministro que hemos conocido para colmar nuestro depósito de Autoestima, depende de una fuente exclusivamente externa: los demás.
Esta es la razón por la que al quedarnos a solas, sentimos que nos FALTA amor y compañía.
Ello nos lleva a creer que no tenemos ningún valor, sino que nuestra Valía nos la da la Gente.
Como en todos los órdenes de la vida, debemos buscar el equilibrio: sin convertirnos en Ermitaños; tampoco debemos creer que debemos vivir ignorándonos y tratando sólo de agradar a los demás.
W. Shakespeare expresó:
“Si te sientes aburrido o mal estando solo, es porque estás mal acompañado.”
Otro enemigo actual de nuestra Solitud, es el Celular.
Su uso normal “acerca a los lejanos”, pero su intenso y muchas veces innecesario uso “aleja a los cercanos”, siendo directamente proporcional a lo “solo y aburrido” que te sientes cuando estás contigo mismo.
Está calculado que consultamos nuestro Celular entre 100 y 200 veces al día, pasándonos una media de 2–3 hs. pegados a la Pantalla Chica.
Generando con ello “Fatiga Visual y Digital”, que nos cansa físicamente
y embota mentalmente.
Llegando al punto extremo que la Tecnología nos utilice y manipule.
Deberemos ir entendiendo que la esencia de la Felicidad y Paz Mental no está en el intrascendente “Ruido Social”, sino en la frecuencia y calidad del Diálogo que mantenemos con nosotros mismos, que nos llevará a cultivar la tan manida “Salud Mental.”
– “No existe hazaña más grande en el Mundo, que saber estar plácidamente con uno mismo.” (Michel de Montaigne).