13/05/2025
"EL PERDÓN Y LA SALVACIÓN"
Entre la comunidad cristiana son frecuentes algunas interrogantes sobre la salvación:
Se gana? Se pierde? Qué se debe hacer para no perderla?
Lucas 23:39-43 dice: "Uno de los criminales colgados junto a él se burló: «¿Así que eres el Mesías? Demuéstralo salvándote a ti mismo, ¡y a nosotros también!». Pero el otro criminal protestó: «¿Ni siquiera temes a Dios ahora que estás condenado a muerte? Nosotros merecemos morir por nuestros crímenes, pero este hombre no ha hecho nada malo». Luego dijo:—Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Jesús respondió: Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso".
El Criminal pidió a Jesús que se acordara de él cuando viniera en su reino. ¿Qué piensan... creyó, o no creyó en Jesús? Acaso tuvo fe en Él?
En un momento de angustia como debe ser la muerte, le pediríamos algo a alguien, si no creemos que lo va cumplir?
Amigos, Jesús dijo "si yo fuera levantado, a todos atraeré a mí mismo". Y Jesús fue levantado en la cruz. El Señor no miente, a todos nos levantó en Él, todos morimos y resucitamos con su vida, y a todos nos dió perdón y Salvación.
Pero no todos tienen fe en Jesús, por lo cual, no todos son llamados.
En Juan 14:6 está escrito "Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús— Nadie llega al Padre sino por mí".
Los que tienen el llamado de Dios, oyen la voz de Jesús y lo siguen, y lo aceptan con toda su mente y con todo su corazón. Ellos son nacidos de nuevo en el Espíritu, y Él no les quitará jamás, lo que ya les dió.
El criminal creyó en Jesús, y eso le fue contado por justicia de Dios, porque dice Lucas 5:32 "No he venido a llamar a los que se creen justos, sino a los que saben que son pecadores y necesitan arrepentirse".
Amigos, estos misterios están ocultos, y son revelados por el Espíritu Santo a los que viven por fe. A éstos, no se les dificulta cumplir con los dos grandes mandamientos, porque aman a Dios sobre todas las cosas, y a su prójimo como a sí mismo, por lo que les hacen el bien, mostrándoles a Cristo el autor y consumidor de la fé. Amén 🙏